El trilobites del mes de Febrero no podría ser otro que el de diseño más innovador y futurista: se trata de HARPES. Es un género de trilobites cuyos primeros prototipos aparecen el periodo Ordovícico y se encuentran típicamente en los yacimientos del Atlas de Marruecos. Es el caso de los prototipos más antiguos del género HARPIDES, como éste perteneciente a la mundialmente conocida como "Formación Fezouata" por su riqueza en todo tipo de géneros y especies de invertebrados marinos fósiles.
Su diseño ha ido variando poco a lo largo de los tres periodos geológicos en los que vivió: Ordovícico, Silúrico y Devónico desde los 500 millones de años de su comienzo hasta los 360 millones en que se extinguió. Aquí tenemos otro ejemplo de Harpides de la Formación Fezouata:
Se caracteriza por un cefalón aplanado con una amplia superficie preglabelar en la que se aprecian pequeños tubérculos y poros. Sus puntas genales son muy largas y le dan forma de herradura, tal es así que a los que se encuentran en el camino de Santiago se les ha llamado las huellas del caballo de Santiago.
Sus ojos son muy pequeños, apenas visibles, pero lo que llama la atención es un tórax compuesto de segmentos estrechos y acabados en un pigidio que se confunde con el tórax (son micropigios).
Ahora veremos, como hemos hecho en otras entradas previas en las que ya hemos tratado este tema, los trilobites Harpes de León y su entorno, que pertenecen a dos periodos geológicos más modernos, el Silúrico y el Devónico:
Me centraré ahora en los HARPES del periodo SILÚRICO que aparecen en León:
Aquí os presento un Harpes (Lioharpes venulosus) del periodo Silúrico Superior del área del Bierzo: en él se observa el gran cefalón y el tórax con sus pleuras, aunque le falta el pigidio.
En este otro ejemplar se observa el cefalón con su típica forma de herradura y podemos hacernos idea de su tamaño. En ambos casos el grado de conservación es muy bueno, ya que el metamorfismo de las pizarras hace que se encuentren en mucho peor estado.
Pero como antes he referido, este género se prolonga hasta el periodo DEVÓNICO, y así a principios de este periodo en el Emsiense, podemos encontrar en León estos raros trilobites. Es muy raro encontrar ejemplares completos, ya que con frecuencia aparecen desarticulados. En este ejemplar se aprecia el cefalón desarticulado en un notable estado de conservación.:
Estos trilobites tenían hábitos filtradores y vivían sobre los fondos marinos de cierta profundidad: allí los ojos no eran tan necesarios, pero es precisamente allí donde se encontraban los nutrientes de los que se alimentaban. Aquí os pongo en esta acuarela mía una reconstrucción de cómo podrían ser en posición de vida: