ORO Y GRAPTOLITOS: una combinación posible en El Bierzo

martes, 28 de agosto de 2018

EL OTRO EXTREMO DE LA SERIE "LOS CABOS": el hallazgo de Protambonites primigenius.

El día 15 de agosto se publicó en Infobierzo la conclusión preliminar de un estudio que hemos realizado durante más de dos años, realizado en el límite Cambro-Ordovícico de una formación geológica que llega al Bierzo procedente de la costa asturiana y que se conoce con el nombre de formación "Los Cabos".
Todo empezó con el hallazgo hace ya varios años de dos fósiles en una viña de Valtuille de Arriba por Alfonso e Inés. A primera vista parecían conchas marinas y en uno de ellos pueden verse claramente las estriaciones, que demuestran un alto grado de conservación.

Se puede ver una sección de la cuarcita roja con varios ejemplares desarticulados de Protambonites primigenius que muestran sus estriaciones radiales (hecho raro en este género por la mala preservación en general). En los ejemplares asturianos también se observan estas estriaciones. Aquí además podemos ver una sección de otro ejemplar de cuarcita en el que los braquiópodos aparecen cortados de forma sagital, pudiendo observar la asimetría de las valvas y su articulación:
 
Otros restos menos llamativos que se encuentran y que son muy escasos podrían corresponder a cruzianas de trilobites:

Para una información más completa os remito al enlace de Infobierzo, donde se explica la importancia del hallazgo en el contexto geológico en que se desarrolla: son las primeras evidencias de este piso de edad cambro-ordovícica en el área del Bierzo, es decir, en el otro extremo de esta formación que aflora aquí. Hay que decir que es complicada su localización exacta porque toda la zona se halla cubierta de una tupida vegetación, la cual impide localizar las capas exactas, a diferencia del extremo asturiano, donde las capas quedan expuestas en los acantilados de la costa.
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jueves, 9 de agosto de 2018

TRILOBITES DEL BIERZO: las diferentes facetas del Silúrico berciano

Los trilobites son unos artrópodos primitivos y sumamente sofisticados. Surgieron en la explosión del Cámbrico hace más de 500 millones de años, en unos mares con enormes plataformas continentales. Al principio no tenían depredadores naturales y alcanzaban considerables tamaños, pero después fueron surgiendo cada vez más depredadores.

En el área que hoy llamamos el Bierzo, hace unos 415 millones de años, en un periodo posterior llamado Silúrico, los mares poco profundos eran el hogar de estos artrópodos y estaban adaptados a todo tipo de formas de vida.
Con el paso del tiempo y de las eras geológicas, los estratos donde se depositaron sus restos sufrieron diversos tipos de compresión y deformación.
Hay zonas de baja compresión donde los restos se conservan sin apenas deformación, con todo lujo de detalles. En estos mares vivían trilobites con pequeños ojos pedunculados, llamados Encrinúridos.
Forman parte del grupo de los Phacópidos, un grupo muy potente, y se caracterizan por los tubérculos del cefalón, colocados en varias hileras.. Este de arriba es un Cromus sp.
Otros de este mismo grupo eran más alargados, igualmente con filas de tubérculos en cuyo extremo parece que había pelos sensores. Es el caso de este Struszia sp:
Este grupo de Encrinúridos compartía el hábitat con otros trilobites llamados harpétidos, como este Lioharpes sp.
Aquí podemos ver un cefalón típicamente en forma de herradura, con borde glabelar amplio y aplanado. Poseían pequeños tubérculos (pueden verse en la imagen) y los ojos eran diminutos, casi imperceptibles.
La asociación se completa con un trilobites muy especial: era muy largo por su gran número de segmentos torácicos, recordando a una serpiente (largo y estrecho) y su cefalón (que se muestra abajo) está formado por una glabela compleja:
En otras zonas del silúrico berciano, las mismas capas han sido sometidas a una intensa compresión y metamorfismo. Aparece la misma asociación, pero el aspecto y el grado de conservación son muy diferentes:
 Cefalón de un Encrinúrido (arriba)
 Trilobites Harpes (Lioharpes venulosssus), arriba.
Cefalón de Crotalocephalus transiens (arriba).
Pero una completa fauna les acompañaba, formando parte de este complejo y rico fondo marino. Es el caso de los Crinoideos, cuyos tallos aparecen bien conservados:

 También aparecen corales en su hábitat:

Y por último, aunque hay varios tipos biológicos más, están los braquiópodos:


Estos son tan sólo un ejemplo de lo que en esta zona hubo hace unos 400 millones de años en estos antiguos mares silúricos. Sus restos han quedado en la comarca del Bierzo y su entorno como testigos de aquéllos remotos tiempos.